I Timoteo 2.9-15, Traducción en Lenguaje Actual
También deseo que las mujeres se vistan con decencia, sencillez y modestia. Que no llamen la atención con peinados exagerados ni poniéndose ropa muy cara, ni que usen costosas joyas de oro o adornos de perlas. Al contrario, la gente debe admirarlas por las buenas cosas que hagan, como se espera de las mujeres que aman y respetan a Dios.
También deseo que las mujeres se vistan con decencia, sencillez y modestia. Que no llamen la atención con peinados exagerados ni poniéndose ropa muy cara, ni que usen costosas joyas de oro o adornos de perlas. Al contrario, la gente debe admirarlas por las buenas cosas que hagan, como se espera de las mujeres que aman y respetan a Dios.
Quiero que las mujeres escuchen con respeto y en silencio lo que se les enseñe. Y no permito que las mujeres enseñen en las reuniones de la iglesia, ni que les den órdenes a los hombres. Porque Dios creó primero a Adán, y después a Eva. Además, Adán no fue el engañado por Satanás, sino Eva. Y cuando Eva fue engañada, pecó. Sin embargo, las mujeres se salvarán si tienen hijos, si confían en Jesucristo, y si aman a los demás y viven con modestia y santidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario