sábado, 23 de junio de 2018

Preparados/as integralmente para ser testigos de Jesús, L. Cervantes-O.

Resultado de imagen para jesus send his disciples painting



24 de junio, 2018

Y ahora, vayan; pero tengan cuidado, porque yo los envío como quien manda corderos a una cueva de lobos.
Lucas 10.3, TLA

Jesús de Nazaret se empeñó en preparar a sus discípulos para que estuvieran bien capacitados al momento de realizar la tarea que él mismo había comenzado: dar testimonio de la venida del Reino y llamar al arrepentimiento para que las personas comenzaran a participar y disfrutar de sus beneficios. Su urgencia escatológica se manifestó en el hecho de que envió a un grupo de ellos para reproducir la labor que él mismo estaba desarrollando. Se trató de una auténtica incursión, una avanzada (Lc 10.1b) en el mundo opuesto a la presencia de los signos del Reino de Dios, de ahí las advertencias tan puntuales del Señor para actuar y la mentalidad con la que debían hacerlo. La advertencia del v. 2, en el sentido de que el trabajo era muy vasto, funciona como un desafío ante la necesidad de anunciar el advenimiento del Reino.

“El número ‘setenta’ podría tener aquí el valor simbólico de «todo el mundo», según la tradición de que todo el mundo estaba dividido en ‘setenta naciones’ (Gén 10); sea como fuere, sí hay una alusión en la perspectiva lucana a la universalidad del mensaje y a la universalidad de la vocación y urgencia del anuncio” (Biblia de Nuestro Pueblo). Ya en Lc 9.1-6 Jesús había hecho un primer envío de los Doce, con lo cual quedaba simbolizado el pueblo de Israel compuesto por doce tribus (y en 9.52-53 habían sido rechazados por los samaritanos). Al enviarlos de dos en dos buscó cubrir tres aspectos: “la ayuda mutua; garantizar la verdad de su testimonio (cf. Dt 19.15); y ser una expresión viviente del evangelio de la paz (cf. vv. 5-6)”.[1] El v. 3 destaca los riesgos de este trabajo en un contexto de rechazo y falta de aceptación, y el 4, la distancia con que debían actuar, además de no apegarse a las cosas materiales. La centralidad del mensaje de paz también es relevante, así como la actitud positiva ante una buena recepción (vv. 7-8).

En el v. 9 aparecen las dos acciones principales de los enviados: curación de enfermos y predicación, puesto que el Reino de Dios se manifestaría en la misión cristiana de ambas formas. Inmediatamente, Jesús acentuó los aspectos negativos de la respuesta a esta misión: al ser rechazados, los discípulos deberían realizar gestos proféticos para evidenciar la oposición al mensaje y subrayar la inminencia de la venida del Reino (vv. 11-12). El lenguaje se endurece y asume una postura de juicio: “Todavía en relación con el tema del envío y especialmente con el tema de los posibles rechazos, Lucas pone en labios de Jesús esta especie de lamentación profética que también suena a amenaza” (BNP). Los enviados conocerán la misma resistencia que enfrentó su maestro (vv. 13-16).

Lo que Jesús lamenta es la incredulidad de esas ciudades y su poco empeño en poner en práctica sus enseñanzas. Jesús puede notar que, tras su paso por esas ciudades y regiones, aunque con muchas manifestaciones de júbilo por sus palabras y signos (v. 17), no quedó aparentemente nada. Con todo, la visión apocalíptica del Señor, como resultado de ese trabajo, advirtió cómo sería derrotado el enemigo del Reino de Dios (v. 18), todo ello anticipado por la acción obediente de los enviados. “Lucas narra la misión de los 70 como un triunfo y lo hace con entusiasmo y simpatía. […] y relaciona la explosión de gozo de Jesús con el regreso de los 70”.[2] La preparación integral de los discípulos/as implicó los aspectos teóricos (enseñanza) y prácticos (envío) para cumplir su misión.


[1] Robert J. Karris, “Evangelio de Lucas”, en Nuevo comentario bíblico san Jerónimo. Nuevo Testamento y artículos temáticos. Estella, Verbo Divino, 2004, p. 172, http://mty.sanjuan.org.mx/dki/Raymond_E_Brown-Nuevo_Comentario_Biblico_San_Jeronimo-NT.pdf.
[2] Pablo Richard, “El Evangelio de Lucas. Estructura y claves para una interpretación global del Evangelio”; en RIBLA, núm. 44, 2003/1, p. 17, www.claiweb.org/images/riblas/pdf/44.pdf.

No hay comentarios:

Apocalipsis 1.9, L. Cervantes-O.

29 de agosto, 2021   Yo, Juan, soy su hermano en Cristo, pues ustedes y yo confiamos en él. Y por confiar en él, pertenezco al reino de Di...