¿Por qué te fijas en lo malo que hacen otros, y no te das cuanta de las muchas cosas malas que haces tú? Es como si te fijaras que en el ojo del otro hay una basurita y no te dieras cuenta de que en tu ojo hay una rama. ¿Cómo te atreves a decirle a otros: "Déjame sacarte la basurita que tienes en el ojo", si tienes una rama en el tutyo? ¡Hipócrita! Primero saca la rama que tienes en tu ojo, y así podrás ver bien para sacar la basurita que está en el ojo del otro.
No den a los perros las cosas que pertenecen a Dios. Tampoco echen lo más valioso a los cerdos. Ninguno de ellos sabe apreciar su valor, y lo que harán será pisotearlas y morderlos a ustedes. Pidan a Dios, y él les dará. Hablen con Dios, y encontrarán lo que buscan. Llámenlo, y él los atenderá. Porque el que confía en Dios recibe lo que pide, encuentra lo que busca y, si llama, es atendido.
¿Alguno de ustedes le daría a su hijo una piedra, si él le pidiera pan? ¿Le daría una serpiente, si le pidiera pescado? "Si ustedes, que son malos, saben dar buenas cosas a sus hijos, con mayor razón Dios, su Padre que está en el cielo, dará buenas cosas a quienes se las pidan.
¿Alguno de ustedes le daría a su hijo una piedra, si él le pidiera pan? ¿Le daría una serpiente, si le pidiera pescado? "Si ustedes, que son malos, saben dar buenas cosas a sus hijos, con mayor razón Dios, su Padre que está en el cielo, dará buenas cosas a quienes se las pidan.
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