Salmo 119.97-104 / Apocalipsis 1.1-11, Traducción en Lenguaje Actual
1 Dios le ha mostrado a Jesucristo lo que pronto sucederá, para que él se lo enseñe a sus servidores. 2
Por eso Jesucristo se lo ha comunicado a Juan, su servidor, por medio de un
ángel; y Juan ha puesto por escrito toda la verdad.
3 ¡Dios bendiga a quien lea en público este mensaje! ¡Y bendiga
también a los que lo escuchen y lo obedezcan! ¡Ya viene el día en que Dios
cumplirá todo lo que se anuncia en este libro! […
5 Yo, Juan, saludo a las siete iglesias que están en la provincia
de Asia. Dios es el que vive, el que siempre ha vivido, y el que está por
venir. Deseo que Dios y Jesucristo, y los siete espíritus que están delante de
su trono, los amen a ustedes y les den su paz. Podemos confiar en que
Jesucristo nos ama y dice la verdad acerca de Dios. Él fue el primero en
resucitar, y es también el que gobierna sobre todos los reyes de la tierra.
Por medio de la muerte de Jesucristo, Dios nos ha perdonado nuestros pecados. 6 Además, Cristo nos permite gobernar como reyes, y nos ha puesto como sacerdotes al servicio de Dios su Padre. Por eso, ¡alaben todos a Jesucristo, y que sólo él tenga todo el poder del mundo! Amén.
7 ¡Miren! ¡Cristo viene en las nubes!
Todos lo verán venir,
aun los que lo mataron;
y todos los habitantes del mundo
llorarán por él.
Así sucederá. Amén.
8 El Señor todopoderoso, el que vive y siempre ha vivido, y que
está por llegar, dice: “Yo soy el principio y el fin”.
9 Yo, Juan, soy su hermano en Cristo, pues ustedes y yo confiamos en él. Y por confiar en él, pertenezco al reino de Dios, lo mismo que ustedes; tengo los mismos problemas y dificultades, pero también tengo la fuerza que Dios nos da para soportar esos sufrimientos. Por anunciar el mensaje de Dios y hablar de Jesucristo fui enviado a la isla de Patmos. 10 Pero un domingo quedé bajo el poder del Espíritu Santo. Entonces escuché detrás de mí una voz muy fuerte, que sonaba como una trompeta. 11 Esa voz me dijo: “Escribe en un libro lo que ves, y envíalo a las siete iglesias de la provincia de Asia, es decir, a las iglesias de Éfeso, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardis, Filadelfia y Laodicea”.
Año XXVII, Núm.34, Domingo 29 de agosto de 2021
Preside: D.I. Mario González Pérez
Introito
Preludio
Hno. Jacobo
Núñez Cabrera
Salmo 19, 1er video Melani Núñez Valverde
Una
liturgia sincera y responsable
Salmo 119.137-143
Oración de ofrecimiento
Himno: “Soberano Señor de los mundos” (60)
El perdón divino llega como bendición
Ministro: Traemos ante ti, oh Dios,
nuestra vida entera, con la confianza de obtener tu perdón para nuestras muchas
faltas. Que tu amor y tu gracia nos rodeen, Señor.
Momento
de oración personal. / Oración audible.
Himno “Cerca, más cerca” (333)
Celebramos
la unidad en la fe
Saludos y felicitaciones de cumpleaños
Himno: “Dios, grande es tu amor” (56)
Salmo 19, 2o video Ariel Osvaldo Trejo Núñez
La oración común
Todo nos plantea problemas,
incluso cuando creemos y obedecemos lo más posible. Orar en esta situación (y
ésta es la de todo cristiano) significa: ir a Dios, pedirle que nos conceda lo
que nos falta, la posibilidad, la fuerza, el coraje, la serenidad, la prudencia;
que nos conceda obedecer la ley, cumplir los mandamientos. Y después que nos
conceda continuar creyendo, creyendo a pesar de todo, y que renueve nuestra fe.
Tal petición no puede ser dirigida más que a Dios. […] Porque es la palabra de
Dios la que nos mantiene en esta situación en la que la oración llega a ser una
necesidad.
Karl Barth (1886-1968)
Oración de intercesión
Proclamación de la Palabra
Lectura del Antiguo Testamento Salmo 119.97-104
Lectura del Nuevo Testamento Apocalipsis 1.1-11
Salmo 19, audio Jedrik Zuriel Trejo Núñez
Reflexión bíblica
“POR La palabra DE DIOS Y EL TESTIMONIO DE JESUCRISTO”
Pbro. Hugo Gallardo Duarte
La Palabra anima y fortalece
Himno: “Abre mis ojos para ver” (141)
Salmo 19, 3er video A.I.
Edith Martínez Vázquez
Acto
de premiación del Concurso bíblico
La entrega de la vida entera
Den a los demás y ustedes también
recibirán. Se les dará una cantidad mayor a la que puedan contener en su
regazo, aunque se la haya agitado y apretado al máximo, siempre se rebosará.
Porque con la misma medida que ustedes midan a los demás, Dios los volverá a
medir a ustedes. Lucas 6.38, Palabra de Dios
para Todos
Himno “Padre, Dueño y Señor” (436)
Oración por las ofrendas
Encaminados/as por su mano amorosa
Himno: “Cristo está conmigo” (330)
Postludio
Intereses de la comunidad
UN PASTOR PRESO VE A CRISTO
Juan Stam
J |
uan
aclara que está en Patmos por causa de la Palabra de Dios (su mensaje
profético) y del testimonio de Jesús (su compromiso cristiano). Posiblemente la
frase “testimonio de Jesús” (cf. 1.2) sugiera la idea de martirio: Jesús, “el
testigo fiel” (1.4; cf. 2.13), puso su vida por el mensaje del evangelio, y
Juan también arriesgó todo y por eso está preso. Fue sentenciado por causa de
su actuación profética y por “la insistencia del profeta en proclamar el
señorío de Cristo contra las pretensiones de otros señores”.
Por haber sufrido condena y castigo a manos
del poder romano, Juan era lo que poco después se iba a llamar un “confesor”:
un martus que ha dado testimonio (marturia) ante las autoridades,
pero sin haber perdido la vida. […]
Al señalar que la visión le vino un día del
Señor, Juan bien podría estar pensando con nostalgia en la comunidad reunida en
tierra continental y en el culto que hubiera querido compartir con ellos. Pero
Dios va a darle una celebración mucho más gloriosa ahí mismo en Patmos. Aquí está
implícito el énfasis litúrgico presente anteriormente en la doxología de 1.4-8
y que se va a sentir en todo el libro, especialmente en Apocalipsis 4-5.
En la soledad de Patmos, Jesucristo
interrumpió el silencio de Juan con una voz majestuosa como de trompeta. Cuando
menos lo esperamos el Señor puede venir a hablarnos. La figura de la trompeta,
primer instrumento musical que aparece en el Apocalipsis, es clásica en las
teofanías bíblicas (Ex 19.12-19; Heb 12.19). En el mundo antiguo, que carecía
de mejores medios de comunicación, la trompeta era el instrumento del heraldo
que proclamaba los anuncios y noticias. La voz le manda escribir en un libro lo
que va a ver, pues su “mensaje profético” sería abierto para todo el pueblo de
Dios. Entonces, como pastor que era, tenía que enviarlo a las siete iglesias de
Asia mencionadas ahora con sus nombres. Aunque este pasaje tiene ciertas
características de un relato de vocación profética, es más bien la asignación
de una tarea específica (cf. Ap 10). Evidentemente Juan ya había sido profeta y
no tenía necesidad de incluir el relato de su vocación en su libro.
Apocalipsis. Tomo I. Buenos Aires, Ediciones Kairós, 1999
(Comentario bíblico iberoamericano), pp. 65-66.
Culto de Comunión y Apertura
5 de septiembre de 2021
“nos rEGOCIiJamos en la esperanza de
la gloria de dios”
Base bíblica: Romanos 5.1-8
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